¡Siente la emoción del fútbol y gana con cada partido!
LONGBOARDWEB.ES › Futbol › Copa Del Rey. El valor doble de los goles como visitante es una regla por la que los tantos logrados en campo rival tienen un valor doble en caso de que se. Siguiendo los pasos de la UEFA, la RFEF ha eliminado esta norma del torneo copero y por tanto no habrá valor doble de los goles fuera de casa en.
Tabla de contenido del artículo:
.jpg?auto=webp&format=pjpg&width=3840&quality=60)
Recorrido del Athletic en la Copa del Rey 2012
Fernando Tirapu. Castellón 0—1 t. Ahora, ya solo Hay gol doble en copa del rey el vía crucis de la liga. También es Hay gol doble en copa del rey
Todo lo que pasó antes y después fue una ópera a la impotencia de un Zaragoza que no le hace un gol a nadie. Y cuando es a nadie, es a nadie.
El rival no tardó en tomar forma de unas de esas trampas camufladas en las primeras eliminatorias de Copa. El Zaragoza no encontró manera de hincarle el diente. Como se esperaba, el Diocesano cedió la pelota. Pero no cedió campo. Por ahí, por donde siempre, comenzó a sufrir el equipo de Carcedo.
Y Zapater tampoco podía darle sentido a lo que el equipo intentaba crear desde la base defensiva. Solo la clase de Francés sacando la pelota logró superar líneas con claridad. Al Zaragoza le costó diez minutos poner su primer centro -malo, eso sí-.
El Zaragoza tenía la pelota, pero el Diocesano comenzó a tener el botín cuando Sales, de esa acción desligada de la molicie del primer tiempo, engañó a Ratón y abrió el marcador. Era el Zaragoza de casi siempre, da igual el tamaño del oponente: improductivo, previsible, flaco… y muy separado con la pelota. La solución ante la crisis de generación fue lanzar en largo a los centímetros de Gueye o la velocidad de Simeone. Hay dos modos de sobrevivir aislado en un ataque de mínimos como el del Real Zaragoza.
Simeone opera desabastecido, pero conectado al juego : incisivo, insistente, astuto, afilado Sin embargo, Gueye es lo contrario: ni le llegan los balones ni sabe cómo encontrarlos, juega como si hubiera caído del cielo.
Al banquillo también se fue Eugeni , desapercibido. Salieron Vada y Bermejo para tratar de rescatar aquello. El Zaragoza mejoró. Bermejo tomó la iniciativa y comenzaron a pasar cosas. Mollejo rozó el gol un par de veces. Después, una internada de Bermejo acabó en un penalti que no se señaló. El Diocesano comenzó a sentir la fatiga.
Una cuestión clave en este tipo de partido desiguales. También el miedo a ganar, a tener ahí al lado, tan cerca, la posibilidad de tumbar al Zaragoza.
De hacer historia. Eso también pesa en las piernas. El conjunto colegial se atrincheró, bien ordenado, sabedor que ahí su rival tenía pocos recursos. El Zaragoza era incapaz de desorganizar esa defensa. A balón parado, Francés no cazó una pelota de gol por poco.
Puche lo intentó de forma defectuosa. Mostró amarillas a los locales Assan 24 y los visitante Mollejo 45 y Fuentes Ratón fue expulsado al acabar por doble amarilla 27 y Se regó antes del partido.
Deja un comentario