Campo de futbol a bola

Un gol en el tiempo añadido siempre tiene dos caras: la euforia y la resignación. Las nubes que planeaban sobre el municipal de La Pobla de Mafumet se trasladaron al campo, especialmente en los minutos iniciales. Los dos equipos arrancaron fríos e imprecisos. Parece que el extremeño abrió la veda, ya que, un minuto después de la primera, llegó la segunda. El protagonista fue Aleix Grabulosa , que envió al palo izquierdo de la portería de Lucas García un mano a mano cuyo rechace, invalidado por posición antirreglamentaria, estuvo muy cerca de acabar en gol.

Ambos equipos, cada uno en su estilo, subieron sus prestaciones en un partido que todo parecía indicar que se decidiría en el barro. También aumentaron las revoluciones del choque, que, tal y como avanzaba, iba ganando en rivalidad y tensión. La Pobla, por su parte, fue a por el segundo, pero tampoco se precipitó, dejando un panorama en que los minutos se sucedían sin que pasara gran cosa. Biel Farrés la tuvo también a la salida de un córner y empezó a sembrar dudas en una Pobla que pudo sentenciar tras una gran carrera de Torrents que, solo ante García, no pudo materializar un disparo que rechazó el guardameta.